El lema "En Dios confiamos" [In God we trust] me resulta particularmente interesante porque tengo el privilegio y la oportunidad de examinar a cada corriente de vida que desea hacer la Ascensión, y de preparar para ellas las iniciaciones particulares que sus pensamientos y sentimientos más internos requieren para su desarrollo y expansión espirituales. Estas iniciaciones no son castigos, sino más bien oportunidades para fortalecer la fe en Dios de los chelas, y la confianza en Su bondad. A veces, las experiencias que son necesarias para esta transformación de lo humano a lo Divino parecen ser extraordinariamente difíciles, especialmente cuando un chela pide que toda su naturaleza sea transmutada en una encarnación, mientras que, de acuerdo con la Ley Natural Divina, él o ella podría tener tantas como veinte encarnaciones... ¡para realizar dicha transformación!
Es la tremenda velocidad de transformar la naturaleza humana en Divina lo que a menudo hace que el chela siente que está siendo "probado" más allá de los límites de su resistencia. Sin embargo, ¿acaso no es mejor que lo que sea menester hacer, se haga rápidamente, considerando que habrá que hacerlo en algún momento? A veces los chelas "piden que se les exima" de iniciaciones adicionales en Luxor bajo Nuestra dirección, y prefieren terminar su curso en una vida futura. Esto es enteramente cuestión de su propio libre albedrío. Sin embargo, algún día, en algún año, en alguna encarnación, cada uno de tales chelas tendrá que completar esta transformación de la personalidad humana, y ser capaz de decir y sentir, tal cual lo hacemos Nosotros, "¡En Dios y en Su bondad confiamos!"
Es la tremenda velocidad de transformar la naturaleza humana en Divina lo que a menudo hace que el chela siente que está siendo "probado" más allá de los límites de su resistencia. Sin embargo, ¿acaso no es mejor que lo que sea menester hacer, se haga rápidamente, considerando que habrá que hacerlo en algún momento? A veces los chelas "piden que se les exima" de iniciaciones adicionales en Luxor bajo Nuestra dirección, y prefieren terminar su curso en una vida futura. Esto es enteramente cuestión de su propio libre albedrío. Sin embargo, algún día, en algún año, en alguna encarnación, cada uno de tales chelas tendrá que completar esta transformación de la personalidad humana, y ser capaz de decir y sentir, tal cual lo hacemos Nosotros, "¡En Dios y en Su bondad confiamos!"